Un total de 21 mujeres que forman parte de la Agrupación de Pacientes Usuarios de Fibromialgia de Rengo participaron de una enriquecedora charla sobre autocultivo y preparados medicinales de cannabis, a cargo del relator y cultivador de Fundación Daya, Marco Merino.

La actividad se llevó a cabo el miércoles 31 de julio en la sede de Fundación Daya, hasta donde llegaron las entusiastas vecinas de la comuna de Rengo, que se animaron a aprender y a generar sus propios usos medicinales de la ancestral planta.

La charla se desarrolló en dos secciones, una por la mañana y la otra, tras la hora de almuerzo, las que abordaron sus respectivas materias. Tal como explica el relator a cargo del curso, Marco Merino, “por la mañana se desarrolló un taller de preparados medicinales, en el que les enseñamos a hacer resina, también les explicamos cómo hacer el macerado con cogollos y también la manera de hacer una crema o ungüento para diversos usos tópicos”. Y agrega que, por la tarde, el curso se enfocó en centró en el autocultivo, en el que “les dimos a conocer algunas plantas en floración y vegetación; las condiciones que necesita la planta para poder crecer y también ayudarles a reconocer cuándo está lista o no la planta”.

A lo largo de todo el curso, las 21 representantes de esta agrupación se mostraron muy interesadas en cada uno de los puntos tratados, lo que se reflejó en la gran cantidad de preguntas e inquietudes planteadas. Es el caso de María Concepción Pozo, quien explicó que el encuentro le sirvió para manejar más aspectos relacionados con el autocultivo. “Pese a que la mayoría de nosotras somos gente de campo y estamos familiarizados con lo relacionado con plantaciones y cosecha, muchas no sabíamos que existen distintos tipos de plantas. Para mí fue una sorpresa saber que no todas las plantas son iguales”, señaló.

Similar experiencia tuvo Mafalda Miranda quien sufre de esclerodermia, que es un tipo de trastorno autoinmunitario, quien aprendió a realizar sus propios aceites de cannabis para aliviar sus dolores, lo que “es muy bueno para mí, porque yo siempre he comprado, pero nunca he sabido si lo que compro es lo que necesito en cantidad y dosis”, explica. A lo que Jessica Arancibia, que sufre de fibromialgia y artritis reumatoidea, agrega que le interesa llegar a estas medicinas no tradicionales, como el cannabis, con el fin de dejar de tomar medicamentos que le provocan molestos y dolorosos efectos secundarios, además de ser muy caros.  “Es por eso que me interesa producir mi propio aceite. Y venir acá a Daya a que me enseñen, es de gran ayuda”, precisa. Y agrega que “nunca es lo mismo leer sobre algo a que le enseñen de manera práctica cómo hacer las cosas. Aprendí muchas cosas que voy a saber aplicar cuando llegue de vuelta a mi casa”.

Estas positivas experiencias fueron valoradas por el relator de Daya, quien también puntualiza que se trató de “una muy buena charla porque estuvieron todas muy atentas a lo que íbamos relatando, y siempre con muchas preguntas e inquietudes”.

 

Publicación: 1 de agosto