El viernes 14 de junio, Fundación realizó una charla en la sede de la Defensoría Penal Pública (DPP) de la región, dirigida a abogados y profesionales de la repartición. La actividad contó con la exposición de la encargada de Daya Punta Arenas, la abogada Verónica Garrido, junto a la doctora Nicole Morienaud. El encuentro, dividido en dos instancias, se entiende como la continuación de un diálogo iniciado en diciembre de 2018, cuando fue la DPP que expuso ante Daya acerca de la ley 20.000 y sus alcances.
En la primera parte del encuentro del 18 de junio, Verónica Garrido expuso ante el personal de la DPP acerca de la experiencia de madres cultivadoras, en el actual escenario legal. La profesional puso especial acento en la incerteza reinante entre las familias de pacientes cannábicos, que si bien obtienen alivio de la planta, lo hacen bajo el permanente temor de eventuales allanamientos policiales e incautaciones de su medicina. En este escenario, Verónica Garrido destacó la urgencia por aprobar a la brevedad la Ley Cultivo Seguro, haciendo un llamado a los legisladores de la zona para que, según dijo, “regulen algo que ya está permitido”. Esto hace alusión al hecho de que, desde 2015, el uso personal, privado y próximo en el tiempo, o para un tratamiento médico, está despenalizado. La Ley Cultivo Seguro, enfatizó la abogada, cierra las puertas a las erróneas prácticas punitivas que terminan por criminalizar a los pacientes y sus seres queridos. Todo en el contexto de entender que, además de las indudables aristas médicas, este es un asunto esencialmente relacionado con los derechos y libertades individuales de las personas.
En la segunda parte del encuentro, la doctora Nicole Morineaud expuso acerca del cannabis medicinal desde un aspecto médico, destacando las diferentes presentaciones, desde extracciones artesanales, hasta fitofármacos estandarizados. Todos ellos, señaló la doctora, conforman un abanico terapéutico cada vez más aceptado por médicos en todo Chile, quienes como ella, no dudan en recetar cannabis, en el entendido de que este cultivo es una herramienta más que la medicina y la ciencia terminarán por integrar a su repertorio de soluciones. Para los defensores públicos, es muy importante comprender los mecanismos fisiológicos que explican la efectividad de la planta, así como las condiciones en que esta se cultiva y procesa artesanalmente, con el fin de enmarcar de la mejor forma las eventuales defensas de pacientes perseguidos por la justicia. Es un proceso en el cual, los defensores públicos de otras regiones también han avanzado, integrando estos conocimientos en su arsenal de argumentos en los alegatos judiciales. El diálogo con la DPP de Magallanes se completó con muchas preguntas e inquietudes de los profesionales del organismo público, con lo cual el encuentro duró cerca de tres horas.
En la discusión sobre cannabis medicinal, es importante darle espacio a las voces correctas. Médicos, abogados, pacientes y familias, todas estas partes tienen algo que decir. Y no pueden reclamar para sí la exclusividad de una vocería, y menos imponer criterios sobre el resto. Porque, si bien la ciencia tiene la palabra en este tema, entendemos que la ciencia no puede ser dogmática, para conservar su carácter innovador, creador y de efectivo elemento sanador. Es central asumir que, tanto o más importante, es respetar el criterio de otros actores, como son los pacientes y los médicos tratantes.
Comentarios recientes